Durante el período de la guerra civil (1642-1647) el castillo (en defensa de los parlamentarios) fue asediado por las tropas reales.
El castillo fue pasando por sucesivas familias nobiliarias hasta que, en la década de 1970, fue vendido a un grupo privado que lo reacondicionó y lo abrió para el turismo.
Una de las cosas que más atrae del Castillo de Warwick, además de sus espacios y de las vistas que se obtienen desde sus diferentes ángulos, es la manera en que se puede observar las distintas formas de vida en las distintas etapas de su historia.